Los Misioneros Redentoristas del mundo entero vivimos y celebramos el año de la promoción de la vocación misionera redentorista, 2013-2014. Esta iniciativa del Gobierno General ti ene dos objetivos: renovar y profundizar nuestra vocación e identidad misionera y promover y acompañar a aquellos a quienes Dios llama a ser parte de esta familia.
El lema que se escogió para este año vocacional es “el de Testigos y Misioneros de la Redención”. Para San Alfonso los grandes misterios de la redención: Encarnación (la humanidad impregnada de la presencia de Dios), Pasión (compromiso y donde sí mismo a los demás en Jesucristo), y Resurrección (vida nueva, presencia permanente y transformación en el Espíritu), son principios fundamentales de la vocación de todo redentorista. cfr. Const. 48 – 56.
Por tanto, para ser anunciadores de estos misterios se debe ser, ante todo, testigos. Al reflexionar pues, sobre nuestra vocación y misión, los Redentoristas nos esforzamos por renovar nuestra identidad de testigos y misioneros de la Redención. Y a esto invitamos a los jóvenes: a seguir a Jesucristo, como testigos y misioneros.